Cañada de Gómez: condenan a dos médicos por la muerte de una chica

La víctima era una joven de 18 años que falleció por un cuadro séptico mal tratado luego de dar a luz. La Justicia dispuso que deben indemnizar a la familia con más de 1.300.000 pesos. Ambos profesionales, identificados como Alberto Scarabotti y Rubén Guercetti, deberán pagarle a los padres de la joven fallecida y a su pareja 603.000 pesos, cifra que con los intereses supera el millón trescientos mil pesos.

Dos médicos de Cañada de Gómez fueron condenados civilmente a pagar más de 1.300.000 pesos por la muerte de una joven de 18 años a la que le dieron el alta en forma prematura tras un parto y no le atendieron adecuadamente un cuadro séptico.

Según informa el sitio rosarino Tiempo de justicia, la mujer, tras cursar su embarazo, se internó en el hospital San José de la ciudad cabecera del departamento Iriondo. Allí dio a luz a un bebé pero recibió el alta médica al día siguiente y, transitando un puerperio tardío, comenzó a sufrir picos febriles.

La chica, de acuerdo a la citada fuente, fue asistida en el centro de salud en varias oportunidades porque persistía el problema y después de varios días le realizaron diversos estudios. Su estado se complicó con los días, por lo que fue derivada a un sanatorio privado de Cañada de Gómez y luego al policlínico Eva Perón de Granadero Baigorria, donde falleció por un síndrome séptico.

En la resolución del Tribunal Colegiado Extracontractual Nº 1 se destaca que los médicos dieron un alta prematura a la paciente, no hubo seguimiento ni estudios adecuados y también ignoraron el cuadro puerperal. La jueza de trámite es la doctora María Angélica Rodríguez.

El puerperio es el período que transcurre desde el parto hasta que los órganos genitales y el estado general de la mujer recuperan la situación que tenían antes del embarazo.

En el fallo judicial se puntualiza que "el médico posee todos los elementos para efectuar un diagnóstico y si lo hace con negligencia le quita al paciente chance de sobrevida". Y agrega que el error culpable de diagnóstico es de suma importancia y en este caso el error provino de negligencia porque no se tomaron las precauciones que el caso exigía.

Sostiene el Tribunal que quien recibe al paciente en situación de peligro asume el tratamiento y por lo tanto es responsable por la mala praxis al aplicar las medidas inadecuadas, y considera que los médicos tuvieron una conducta negligente e imprudente.

Ambos profesionales, identificados como Alberto Scarabotti y Rubén Guercetti, deberán pagarle a los padres de la joven fallecida y a su pareja 603.000 pesos, cifra que con los intereses supera el millón trescientos mil pesos.

Info: Rosario 3