Una habitante de Justiniano Posse, Soledad, relató a Villa María Ya! el calvario que atraviesa junto a su pareja, Pablo, quien se encuentra detenido desde hace diez meses, justo antes de que abriera el bar “Bosque Urbano”, en el marco de una causa que definió como armada.
“Ha sido muy difícil, por el hecho de que él trabajó mucho por este bar, mucho en arte, hizo viajes a la selva para ambientarse y poder armar lo que armó aquí en el bar”, relató la pareja de este hombre oriundo de Monte Buey, quien está preso en la cárcel del barrio Belgrano de Villa María, a disposición de la Fiscalía de Lucha contra el Narcotráfico de Bell Ville.
Soledad agregó: “Atravesó muchas trabas para poder pedir la habilitación, cosas por ahí incoherentes le pedían. Él las presentó todas, hizo todo lo que le pidieron, y llegado el momento donde le tenían que dar la habilitación, le mandaron efectivamente un certificado que decía que estábamos habilitados, pero con una trampa de que no lo mandaron enviado por el intendente”.
“Cuando nosotros confiamos de que ya podíamos abrir, dos días antes de la inauguración, le hacen a él un allanamiento, que fue una investigación que habrá durado diez días, como mucho, presentaron un allanamiento donde a él le encontraron una planta de marihuana y plantines”, añadió.
Asimismo, prosiguió: “Procedieron a llevárselo, porque él no tenía en manos el Reprocann, pero quedó tranquilo, en el sentido de que supuso que presentando el certificado de Reprocann, y así ya han pasado diez meses”. “Tuvo él una investigación de siete meses estando detenido, donde sólo encontraron que él había vendido, en dos ocasiones, cinco mil pesos de marihuana, y debido a eso lo tienen todavía procesado”, explicó.
Más detalles de la causa
Por otra parte, Soledad explicó que en teoría “iba a durar ocho meses el proceso, que es lo que habitualmente dura”, debido a que Pablo “en un momento tuvo una falla”. Además, precisó cómo se dieron estas ventas de marihuana: “Tenía reuniones, se juntaba con amigos donde consumían y siempre saltaba ese que le decía “no me vendés uno”?”
“Esas dos ventas que datan del 2023, lo tomaron como si fuera comerciante, y no es”, manifestó. Agregó que este emprendedor oriundo de Monte Buey tenía Reprocann ya que padece “un problema en el colon”, que trataba “con el aceite de cannabis”
Asimismo, mencionó que actualmente vive en condiciones “tétricas” en la cárcel de barrio Belgrano, debido a los niveles de violencia e inseguridad. También explicó que el proceso judicial “está todo detenido” y que “no hay avances de nada”.
“El abogado que él tenía, que ahora lo estábamos por cambiar, hace unos días fue internado en terapia intensiva, así que si estaba demorado (el juicio), ahora va a estar más demorado”, narró Soledad,
“Le armaron una causa”
Por otra parte, expresó: “No puede ser que esté procesado como si fuese un narcotraficante, por el hecho de que le armaron una causa. Tomaron por ahí declaraciones, las más feas, gente que se complotó con los bares de la competencia y gente de la municipalidad para hablar mal, para hablar cosas incoherentes”
“En las declaraciones que tomaron, por ejemplo, una señora dijo que desde la ventana escuchaba que paraban vehículos o motos, siendo que de un lado del bar tenemos un kiosco 24 horas, y del otro lado del bar, tenemos un bar-boliche”, explicó. También añadió: “Después tomaron otra declaración de un señor que tiene un kiosco a 150 metros, que también veía que paraba gente acá”.
Un bar que nunca abrió
Por otra parte, Soledad relató que más allá de la detención, “Bosque Urbano” nunca abrió: “Cuando se lo llevaron, yo quise abrir el bar, porque ya teníamos todo armado, y me cayó la Policía con un papel de clausura, porque me dijeron que no estábamos habilitados. Y había sido que eso era una “trampita”, por decirlo así”.
Además, responsabilizó de esto último a un “un encargado de la municipalidad” de Justiniano Posse, y consultada por las posibles motivaciones, aclaró que sería por un “tema de competencia”. “Otros bares de acá cerca, no querían que abriéramos por miedo a quitarles los clientes. Pero el punto de nosotros era que inclusive las invitaciones ya estaban enviadas, y estaban enviadas para mucha gente de afuera, lo que nosotros íbamos a traer era más trabajo al pueblo”, agregó.
Soledad contó que actualmente está viviendo en “Bosque Urbano”: “Desde el día en que a él se lo llevaron yo me quedé acá en el bar, estuve como cuatro meses sola, fue muy difícil también para mí estar encerrada acá, y después me tuve que traer a mis niños, porque tuve que desocupar mi casa en Monte Buey, así que actualmente estoy viviendo con mis niñas acá, dentro del bar”.
“Me cortaron la luz al poquito tiempo, me cortaron el agua, así que como que me la tengo que rebuscar de mil maneras”, expresó. También explicó que está “muy complicada” en cuanto a lo laboral: “He ido a pedir trabajo, pero lo dejaron tan mal visto al lugar, y a Pablo, que es como que yo también caí en que estoy en la misma, entonces me rechazan”.
“El fondo de comercio está a la venta”
Finalmente, Soledad relató: “El fondo del comercio está a la venta, el sitio está a la venta por la inmobiliaria, y el fondo de comercio lo tengo yo, con la autorización de Pablo, a la venta”. “Se puede comprar en el mismo lugar, o puedo vender las instalaciones, todo lo que es baño, cocina, salón, algo en particular, yo tengo todo a la venta, también para solventar los gastos de Pablo, y porque tengo que buscar un lugar donde vivir”, añadió.
INFO: VILLA MARIA YA!
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