El fuego quemó tres habitaciones por completo y dañó otros tres sectores de la casa propiedad de Marcela Leguizamón.
Un feroz incendio se desató pasado el mediodía del martes en una vivienda ubicada sobre calle San Lorenzo, propiedad de Marcela Leguizamón.
La propietaria se encontraba sola, cocinaba el almuerzo en una sartén sobre una cocinita abastecida por una garrafa y ubicada fuera de la cocina principal, en un lavadero .
Por unos minutos Marcela se fue a otro sector de la casa y descuidó la cocción que quemó el aceite provocando fuego que rápidamente quemó cartones y maderas que se encontraban cerca.
Escuchó varias explosiones, pero salió a la calle pensando que en la vía pública algo pasaba, hasta que se dirigió al fondo de su vivienda, sintió un silbido y se encontró con el fuego generalizado. Como reacción espontánea le arrojó agua, lo que agravó la situación.
En el lugar que se desató el incendio había otras dos garrafas, por lo que decidió rápidamente salir de la casa y pedir ayuda. Bomberos trabajaron durante casi tres horas para extinguir las llamas, controlar el calor y enfriar las cenizas y escombros. Trabajaron 18 efectivos con 4 unidades.
Las llamas destruyeron por completo tres habitaciones (a una se le cayó un techo con tirantes, maderas y chapas). También afectó otros sectores de la casa, dañados considerablemente por el humo negro, el calor y el hollín.
Leguizamón perdió muchos electrodomésticos, como televisor, lavarropas y secarropas, una máquina de cortar césped nueva, entre otras cosas materiales como camas, roperos, mesitas, y muebles. Las paredes continuaban calientes muchas horas después de extinguido el incendio.
El viento soplaba desde el norte sumando una cuota de suerte a la tragedia porque de haber soplado en dirección contraria las llamas habrían alcanzado la vivienda vecina donde vive su hijo.
“Es una casa que amo, que la obtuve por la pérdida de una hija, es el lugar en el que amo estar; tenía muchas cosas guardadas muy inflamables con las que hago artesanías como plástico, madera y otros elementos; tengo que seguir adelante, la vida es todo, tengo un espíritu que me saca siempre para adelante” indicó Marcela en el noticiero.
Con el correr de los días se evaluará la condición de la estructura edilicia para establecer si puede seguir siendo habitada.
INFO: DESDE MONTE BUEY
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