Sin agua ni energía para conectar una heladera, en una vivienda muy deteriorada y con el techo de la casa con partes desprendidas. Así fue encontrada una familia de trabajadores viviendo en un campo de la zona rural de Villa Valeria. Además de estas irregularidades sobre las condiciones del lugar, se dio con un menor que no está escolarizado, situación que generó aún mayor preocupación de las autoridades intervinientes.
Fue una inspección llevada a cabo por Uatre, delegación Del Campillo, y con intervención del Ministerio de Trabajo, que tras tomar conocimiento de las condiciones en que esta familia trabaja y vive, en un campo al sur de Córdoba casi al límite con San Luis y cuyo propietario sería de Buenos Aires, denunció el caso.
Julia Papa, secretaria general de Uatre de Villa Valeria y zona, señaló a Puntal que es “lamentable seguir encontrándose con este tipo de situaciones. Esta gente no tenía ni cómo tomar agua fresca”. Explicó que la situación venía siendo advertida al empleador. “Yo tuve una reunión hace un tiempo con el dueño, pero nada cambió. Les notifiqué, pero ante el incumplimiento ahora deberán responder al Ministerio. Cuando ayer (jueves) se hizo la fiscalización no había ni encargados ni empleador. Constatamos todas las carencias y ahora van a ser citados por el Ministerio de Trabajo”.
Yo tuve una reunión hace un tiempo con el dueño, pero nada cambió. Les notifiqué, pero ante el incumplimiento ahora deberán responder al Ministerio. Cuando ayer (jueves) se hizo la fiscalización no había ni encargados ni empleador. Constatamos todas las carencias y ahora van a ser citados por el Ministerio de Trabajo
De acuerdo con el material recogido por los inspectores, la vivienda tiene sus instalaciones desvencijadas y carece de instalaciones para agua, luz o sanitario. “No tienen energía para tener una heladera y así como este caso tenemos muchos”, mencionó Papa.
La delegada de Uatre además alertó sobre la situación del menor de edad, que no puede concurrir al colegio por no tener un vehículo para ser trasladado. “La familia tiene su vehículo roto y el encargado no se hace cargo, porque el propietario del campo vive en Buenos Aires”.
Papa dijo que deberían disponer de un remís o facilitarle el acceso a un albergue estudiantil municipal para que el niño pueda estudiar.
En el acta labrada se señala que la familia no puede utilizar un generador disponible en el establecimiento para tener luz, no pueden conectar baterías para acceder a energía, les llevan alimento cada 20 días, no tienen movilidad y no los llevan de regreso cuando terminan los ciclos de trabajo.
Julia Papa indicó que se está trabajando intensamente, pues advierten que son muchos los casos como estos que existen en la zona rural y que si no son denunciados se llega a la explotación laboral.
INFO: PUNTAL RIO CUARTO
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2 comentarios:
Que gente porquería !!!!inhumanos en estos tiempos tenerlos como esclavos....Dios mío de tu justicia no escaparan los dueños del campo !!!!!
Otra vez, sojeros multimillonarios explotando a gente humilde. No me sorprende de esta lacra.
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