Padre Pepe Luque: “Bergoglio le va a hacer muy bien a la Iglesia”

“El domingo (día del padre) me habló el Papa Francisco y ahora soy famoso”, nos dijo el padre “Pepe” Luque, entre risas y saludos, cuando esta semana NUEVO DÍA se comunicó telefónicamente para que nos contara la buenanueva.
Francisco, se comunicó desde Roma para conocer el estado de salud de su querido compañero de Seminario el “Negro” Pepe, para recordar otros compañeros de estudios, para bendecirlo, bendecir al barrio y a la ciudad que lo alberga.
El Papa lo llamó el último fin de semana, mientras el padre Pepe dormía su habitual siesta de los domingos. El llamado dejó perpleja a Liliana Ramírez, la dueña de la casa donde Pepe se hospeda, quien no le alcanzaba la voz para llamar al padre, ¡qué me va a llamar el Papa!!, dijo el padre Pepe, quien realmente tampoco lo podía creer.
Jorge Bergoglio y el padre Luque compartieron cinco años en el Colegio Máximo de los Jesuitas en el Seminario de San Miguel, en la provincia de Buenos Aires, “nos conocemos mucho con el “Gringo”, agregó el Pepe.

“Hablamos un ratito, pero fue suficiente para escucharlo como siempre, pausado y con las mismas expresiones profundas”, expresó y agregó “me preguntó como andaba, no lo quise estrujar porque debe estar muy ocupado, me dio la bendición, me preguntó por los otros curas jesuitas, en realidad fue una charla de compañero a compañero, ¡hola Bergoglio, hola Negro!, recordó.
El padre Pepe llegó a Leones en 1981 para hacerse cargo de la parroquia Nuestra Señora del Rosario y se quedó en nuestra comunidad hasta 1985.
Actualmente está a cargo de la capilla Sagrado Corazón de Jesús del barrio Las Playas de la ciudad de Villa María y colabora en la parroquia del Luján. En este tiempo, un dolor inmoviliza una de sus piernas, situación que lo motiva a vivir junto a la familia Ramírez. “En este tiempo estoy muy dolorido por un problema en una de mis piernas, que me impide movilizarla, por ello estoy diciendo la misa sentado”.
De todos modos, en la medida de sus posibilidades, los sábados y domingos atiende el hospital, la capilla, visita a los enfermos y da misa.
Antes de finalizar la comunicación telefónica, volvimos al Papa Francisco, recordamos que lleva cien días en el Vaticano, y que a pesar del lugar y las responsabilidades diarias, no se ha olvidado de sus amigos. “Un hombre que te demuestra los pequeños gestos después de más de cuarenta años, te indica su humildad, que es parte de su esencia. Bergoglio le va a hacer muy bien a la Iglesia”, finalizó el padre Pepe.

Info: Nuevo Día
Fotos: Lucrecia Valinotti - Villa María.
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