Leones se repone de una fuerte tormenta

Vientos huracanados superiores a los 100 kilómetros por hora azotaron a esta ciudad del sudeste cordobés, el lunes por la noche. Cuantiosos daños materiales. No hay heridos de magnitud. Noetinger se quedó sin luz por la rotura de una línea de alta tensión en Leones.

Lentamente, la ciudad de Leones se repone de una feroz tormenta de agua, viento y granizo. Sin embargo, entre los vecinos aún impera una sensación de incredulidad, sorpresa y desconcierto por la magnitud del fenómeno meteorológico, que dejó a buena parte de la ciudad literalmente "dada vuelta".

El panorama en esta ciudad del sudeste cordobés fue desolador, con decenas de árboles caídos o arrancados de cuajo, ramas atravesadas en las calles, techos volados, ventanas y persianas rotas, cables de luz cortados, vidrios de negocios hechos añicos, carteles tirados en el piso, columnas de alumbrado tumbadas y postes de teléfono partidos o inclinados.

La tormenta se desató alrededor de las 22.40 y, por momentos, las ráfagas de viento huracanado superaron los 100 kilómetros por hora. Llovieron 42 milímetros en sólo 20 minutos, pero los desagües funcionaron.

La luz se cortó apenas iniciada la tormenta, y durante buena parte de la madrugada el servicio eléctrico no había sido restituido.

Los bomberos fueron los primeros en salir a prestar auxilio a los vecinos damnificados. Luego, funcionarios municipales hicieron lo mismo, aunque recién esta mañana pudieron relevar los daños materiales. Por suerte, sólo hubo heridos leves.

Hay vecinos históricos que no recuerdan haber vivido una tormenta igual "en décadas". Otros aseguran que fue "la más fuerte, como la cola de un tornado", según mencionaron en las redes sociales.

El secretario de Obras y Servicios Públicos de la Municipalidad local, Alejandro Rosso, admitió que "nunca vio algo similar" y que la tormenta provocó "serios daños" en distintos sectores de la ciudad.

La zona oeste, más castigada
Precisamente, Rosso dijo que "la zona oeste" de Leones fue la más afectada por la tormenta. De hecho, dos galpones del Parque Industrial -ubicado a metros de la vieja ruta 9- resultaron con daños significativos y con sus tinglados retorcidos.

INFO: LA VOZ DEL INTERIOR (German Pandolfi)
FOTO: Nuevo Día
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