Aunque la situación general mejoró, aún hay sectores de cada localidad bajo el agua. Temen nuevos anegamientos.
BELL VILLE - IDIAZÁBAL - Las localidades de Bell Ville e Idiazábal, que padecen desde hace varios días el avance de las aguas sobre el ejido urbano, continúan en alerta ante el temor de una nueva crecida del río Ctalamochita en el primero de los casos y por el posible arribo de nuevas masas liquidas desde los campos vecinos en la otra población.
Si bien el río Ctalamochita registró bajantes en los últimos días en su recorrido por Bell Ville, ayer volvió a ascender ubicándose en 9,37 metros. Por esta razón, unas 15 cuadras de distintas calles continuaban anegadas.
El estado de alerta permanente de Defensa Civil se debe a que el nivel del río fluctúa en centímetros (entre ascenso y descenso), situación que “se genera por el comportamiento de numerosas variables, como lluvias en los nacientes de la cuenca, en todas las zonas rurales inundadas y condiciones climáticas entre otras”.
Desde el municipio aseguraron que esta situación del río Ctalamochita “se mantendrá por varios días por lo que se monitorea y analiza constantemente la situación y el comportamiento hídrico en toda la cuenca del Tercero”.
De todas maneras, en la jornada de ayer se dictaron clases, aunque desde el gremio docente se había insistido en evitar que los niños y docentes concurran. El nivel de asistencia fue menor al esperado, indicaron.
En el centro de evacuados ya no quedan personas, aunque algunas propiedades todavía están deshabitadas por precaución.
“Las tareas de escurrimiento del agua están supeditadas al nivel del Río, ya que se encuentran numerosos desagües obstruidos para evitar el ingreso del agua y por ende mayores inconvenientes”, explicaron desde el municipio.
No obstante, y para contrarrestar este problema, se están utilizando numerosas bombas de extracción en diversos sectores de la ciudad.
Idiazábal mejora
A través del Grupo Operativo de Emergencia, integrado por las fuerzas vivas del pueblo y Bomberos Voluntarios de la zona, continuaron ayer en Idiazaábal las tareas para extraer el agua acumulada en el ejido urbano y para construir nuevas barreras defensivas contra la masa líquida que llega de los campos del oeste.
En el centro de evacuados apenas hay 1 persona, ya que las 6 familias que estaban desde el fin de semana retornaron a sus hogares.
“No se puede circular con autos particulares por las calles del pueblo para evitar el oleaje y la introducción de agua en los hogares, se cortó el alumbrado público, se dictó el asueto administrativo y no se dictaron clases en el establecimiento educativo”, indicó el subcomisario Juan Loyola.
INFO: LA MAÑANA DE CÓRDOBA
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