La medida fue dispuesta por el Tribunal de Conducta Policial. La sanción incluye al comisario que estaba a cargo de la dependencia. En medio del dolor, ayer sepultaron a Mariela Jaimez y Julio Medina.
En medio del estupor por el femicidio y posterior suicidio en la celda de la comisaría de Las Perdices, los tres policías que cumplían tareas en la dependencia policial fueron pasados a situación pasiva.
Mariela de las Mercedes Jaimez recibió seis puñaladas por parte de su exesposo Julio Medina, en el domicilio que hasta una semana atrás compartían en bulevar Córdoba de la población ubicada en el departamento Tercero Arriba. El femicida, tras ser detenido, se quitó la vida ahorcándose en la comisaría con un cordón de un buzo.
En medio del dolor de familiares y amigos, ayer fueron sepultados los restos de Jaimez y Medina en el cementerio local.
La presidenta del Tribunal de Conducta Policial de Córdoba, Ana Becerra, confirmó que los policías que cumplían funciones durante la jornada del miércoles en Las Perdices pasaron a situación pasiva debido al hecho sucedido en la dependencia policial.
En este sentido, indicó que la decisión es una “medida cautelar” ya que se están recolectando todas las pruebas pertinentes -fotografías y testimoniales, entre otras- para proseguir con la investigación.
Además precisó que en la localidad sólo eran cinco los efectivos que se encontraban desempeñando sus tareas, incluyendo al que estaba ejerciendo su labor en el banco.
Respecto al modo en que ocurrió el suicidio, Becerra expresó que eran tres los policías que se encontraban en la comisaría cuando el hombre fue trasladado a la misma y que, en principio, se habían tomado las medidas de seguridad al momento de ingresarlo.
Seguidamente añadió que, como consecuencia de que se había producido una crisis entre los familiares cuando llegaron al lugar del crimen, dos de esos efectivos se apersonaron allí para colaborar con motivo de esta situación.
Así, en la comisaría sólo quedó un suboficial cuando el agresor se quitó la vida en su celda, aparentemente, con el cordón de su buzo.
La funcionaria señaló que se constituyó una comisión para resolver esta situación “de gravedad”.
Los policías implicados en el caso, según se pudo conocer, son el comisario Cristian Padilla y los suboficiales Claudio Martínez y Hernán Paván.
Duelo
El intendente Víctor Falvo dispuso ayer duelo por el hecho, teniendo en cuenta que Jaimez cumplía funciones como enfermera del hospital municipal.
Muestras de dolor se vivieron ayer en el velatorio y posterior sepultura de los protagonistas del lamentable suceso, mientras los vecinos no logran entender lo que sucedió.
Aseguran que si bien estuvieron algunas veces distanciados, no hubo denuncias o comentarios de hechos violentos por parte de Medina hacia la mujer, que el año pasado se había recibido de enfermera profesional en la ciudad de Villa María.
Desde hace una semana, Jaimez se había radicado en Río Cuarto junto a su nueva pareja. Esta situación habría provocado que Medina tomara la decisión final, luego de una fuerte discusión que mantuvieron en la mañana del miércoles en el domicilio del matrimonio.
Medina tomó un cuchillo de la cocina y le aplicó seis puñaladas en el cuello, que terminaron con la vida de la mujer, de 50 años.
Cuando llegó la Policía, la enfermera estaba sin vida y el femicida intentó quitarse la vida en el patio, aunque desistió de la medida y fue trasladado hasta la comisaría, donde quedó detenido. En la celda, se quitó un cordón del buzo y se ahorcó.
INFO: PUNTAL RIO CUARTO
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